VACANTIS APOSTOLICAE SEDIS

"Quod si ex Ecclesiae voluntate et praescripto eadem aliquando fuerit necessaria ad valorem quoque." "Ipsum Suprema Nostra auctoritate nullum et irritum declaramus."

EL MIEDO AL PAPA (Mons. Gaume) (VIII)


Mons. Gaume
¿Cuál será este despotismo? 
(parte II)

                                                                                
VI.

En cuanto a las nacionalidades de segunda categoría, sabemos la importancia que se les da desde hace varios años. ¿Qué es la guerra italiana? ¿Qué es la política prusiana sino la absorción de pequeñas nacionalidades en beneficio de nacionalidades más grandes?


¿Quién puede responder que dentro de poco estas grandes nacionalidades no serán absorbidas sucesivamente y no servirán para formar una nacionalidad preponderante, que acabará siendo dueña inigualable de la humanidad?


¿No están todos los elementos materiales y morales preparados para ello? ¿Es que con la velocidad de las comunicaciones, un déspota todopoderoso no puede enviar sus órdenes absolutas en un abrir y cerrar de ojos, de un extremo a otro de su imperio; y, según sus caprichos, hacer maniobrar a millones de hombres? ¿No son la ausencia general de fe, la degradación del carácter, el culto al interés personal, los tristes garantes de una obediencia pasiva y sin resistencia?


                                                            
VII.

Añádase ese bienestar material y la fiebre del goce, unidos a la emancipación de la razón, por la negación de toda creencia; a la emancipación de la carne, mediante la destrucción del sentido moral; a la visible tendencia al despotismo por parte de todos los gobiernos, son todos preparativos para un despotismo universal.


¿No es ya sorprendente que el mundo actual tienda a ello de manera incontestable? Desde el resurgimiento del paganismo, la mitad de los reyes de Europa se han autoproclamado papas; la otra mitad tiende a convertirse en uno. Así, en diferentes proporciones, todos aspiran a hacer realidad, para su beneficio, el lema de los césares paganos: Imperator et summus Pontifex, Emperador y Soberano Pontífice. Esto significa: concentración de todo el poder espiritual y temporal, en manos de un hombre que se llamó a su vez Nerón, Calígula, Diocleciano, y que puede llamarse Robespierre, Bonaparte, Bismarck o Gambetta.


            
VIII.

Ésta es la pendiente por la que se desliza rápidamente el mundo actual, y no parece sospecharlo; ¿qué digo? se irrita cuando le advertimos al respecto.


¿No se levantó, y no declamaron todos sus órganos en todos los tonos, cuando, para desilusionar a las naciones, el Syllabus llegó a declarar que todo lo que llamamos progreso, liberalismo y civilización moderna, es incompatible con los principios del catolicismo 1?


Sin embargo, nada es más inteligente y más fácil de justificar que tal condena. Entendido en el sentido moderno, el resultado de todas estas cosas es disminuir la autoridad tutelar de la Iglesia, y
vincular cada vez más al hombre a la tierra: dos cosas esencialmente contrarias a los intereses de la sociedad y al destino de la humanidad.


Continuará...


1 Es la proposición número 80 condenada por el Syllabus, y que está concebida así: "El Romano Pontífice puede y debe reconciliarse y comprometerse con el progreso, con el liberalismo y con la civilización moderna". (*Nota de Javier: ¡Justo lo que hizo el astuto y perverso Anticristo Montini-Pablo 666: reconciliarse y comprometerse con el mundo pagano y ateo enemigo de Dios Uno y Trino, alabando hipócritamente el progreso meramente humano, el liberalismo y la civilización moderna, donde Cristo y su Evangelio han sido completamente desfigurados y borrados!)

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