LOS EJERCICIOS ESPIRITUALES DE SAN IGNACIO DE LOYOLA
(Aloysius Bellecius SJ, Madrid, 1867).
Es preciso servir á Dios de la manera que Él quiere. ¿Puedes ponerlo en duda? ... ¿Cómo ? Ni aun el labrador sufre que el criado que ha tomado para su servicio , le trabaje de una manera diferente de la que le ha prescrito ; ¿y solo Dios había de tolerar el olvido de sus derechos ? Nadie paga un servicio
prestado de un modo distinto del que se ha pedido ; ¿ por qué habia de recompensar Dios servicios semejantes ? Hasta los mismos beneficios son desdeñados y pierden su mérito si se nos hacen de otra manera que la que deseamos ; ¿ qué será de los servicios que son debidos ? No , las obras más santas, si no son hechas según el beneplácito de Dios , no son de ningún mérito . No está mi voluntad en vosotros (1 ) , decía en otro tiempo á los israelitas el Señor de los ejércitos ; ¿y por qué ? porque en vuestros ayunos se halla vuestra voluntad (2) . En efecto, no los hacían de la manera que el cielo quería, y así eran abominables á los ojos de Dios .
De todo esto , y sin invocar otra autoridad que la de la razón , se sigue evidentemente que debemos servir á nuestro Criador , no de la manera que á nosotros nos conviene , sino de la manera que á Él le place . Que esta verdad fundamental llame seriamente nuestra atención , que se grabe profundamente en nuestra alma , y quede escrita con caracteres de oro sobre nuestro corazón . Si , pues , el Ser infinitamente sabio quiere que le sirvamos en el desprecio y la pobreza , en las enfermedades ,
penas y persecuciones , le opondríamos una resistencia impía , escogiendo obstinadamente prestarle el servicio que le es debido solo en los honores , las riquezas , la salud y las comodidades de la vida :
es preciso , por consiguiente , que estemos indiferentes en cuanto á la manera con que el soberano Criador de todas las cosas nos manda servirle , indiferentes para todo estado de vida á que quiera llamarnos ó para todo grado de perfección , que espera de nosotros en el estado que tenemos ya escogido.
Esta indiferencia puesta en práctica , es el principal fruto que debemos aplicarnos á sacar de esta meditación . El medio de establecernos en ella sólidamente es penetrar : 1. ° nuestro entendimiento del conocimiento vivo y claro de esta verdad : Yo he sido criado por Dios y para Dios : 2.º nuestra voluntad de la firme y eficaz resolución de querer, en general, servir á Dios en adelante de la manera que Él quiera , y que se digne hacernos conocer en estos Ejercicios.
( 1 ) Malach . , I , 10.
( 2 ) Isaías , LVIII , 3.
Continuará...