Cardenal
Ercole Consalvi
Secretario de Estado de la Santa Sede
Prefecto de la Congregación para la Propagación de la Fe
***La fe de los Apóstoles ha sido y debido ser la fe de San Pedro; los mismos Apóstoles le reconocieron como cabeza de la Iglesia. Cuando, pues, los Obispos constitucionales no sólo no se conforman, sino que por el contrario se oponen a los juicios del romano Pontífice, sucesor de San Pedro, que tiene la misma fe que San Pedro y el mismo magisterio de doctrina, se viene a deducir en sustancia que la fe de ellos no es la fe de los Apóstoles.
Muchos cismáticos y herejes pertinaces en sus errores
dijeron que tenían la fe de los Apóstoles,
pero no por esto los creyó la Iglesia.
dijeron que tenían la fe de los Apóstoles,
pero no por esto los creyó la Iglesia.
Extracto de la carta del 30 de noviembre de 1801 a Talleyrand,el cual exigía que los Obispos constitucionales fueran instituidos canónicamente sin reconocerse ilegítimos y sin admitir sus nefastos y cismáticos errores, cosa que S.S.Pío VII se negó a aceptar.
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S.S.Pío VII
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Relacionado:
https://www.vatican.va/content/pius-vii/it/documents/bolla-ecclesia-christi-15-agosto-1801.html
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