San Roberto Belarmino
Oh Señor santo y misericordiosísimo, que tuviste por bien formar esta alma a imagen y semejanza tuya, perfecciona tu obra; suplícote, Señor, que aumentes en ella la sabiduría y la justicia; escóndela en lo más secreto de tu tabernáculo, y no le toque el lodo de los afectos carnales, ni el humo de las honras vanas, ni el polvo de las riquezas terrenas, ni se manche con la menor mota de los deseos de este siglo. Dame, Señor, gracia para que en todo y por todo, me conforme con tu santa ley, y que de tal manera me ajuste con tu voluntad, que no tenga más querer que el que tú tienes, tan contento en to adverso como en lo próspero, en lo penoso como en lo gustoso, porque se hace en todo tu divina y santa voluntad.
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