Fue elegido y consagrado en Roma sin esperar el consentiintento del emperador.
Había sido apocrisario del Papa en Constantinopla.
Cuatro meses después de su elección reunió un concilio en Letrán, donde en presencia de 105 obispos condenó la herejía de los monotelitas, a sus autores, y fautores, la tesis de Heraclio, y el Tipo de Constante, enviando a todos los obispos de la Cristiandad cartas encíclicas con la condenación para que fuese promulgada en todas partes.
Grande fue la ira de Constante al enterarse de la noticia, y ordenó a Calíope, exarca de Rávena, que se apoderase del Pontífice. El Papa, que se hallaba enfermo, fue arrancado por la viva fuerza de Letrán, y a bordo de una nave fue conducido a Naso, donde su enfermedad se agravó. Transcurrido un año le condujeron a Constantinopla, y allí sin miramiento alguno fue arrojado a una prisión y le habrían dado muerte si el patriarca de Constantinopla, a pesar de ser monotelita, no lo hubiera impedido. Fue por fin desterrado al Quersoneso (Tracia), donde murió a consecuencia de los malos tratos a que fue sometido (655).
Sus restos fueron llevados a Constantinopla y de allí a Roma, recibiendo sepultura en la iglesia que tomó el nombre de San Martín de los Montes. Han quedado de este Papa algunas cartas.
Por su tiempo tuvieron lugar los concilios octavo y nono de Toledo (años 653 y 655).
Los Papas, desde San Pedro hasta Pío XII
Giuseppe Arienti
Con Licencia Eclesiástica 1945