SAN ANACLETO (100-112)
Es dudosa la distinción que se hace entre él y Cleto, y son igualmente dudosos los hechos de su época.
Durante el pontificado de San Anacleto, sucesor de San Clemente, continuó recrudeciéndose la persecución. Dice la leyenda que el mismo emperador interrogaba a veces a los cristianos para confundirles e inducirles, con la amenaza de los tormentos y de la muerte, a renunciar a su religión.
San Anacleto ayudó a los perseguidos y condenados a mantenerse firmes en la fe cristiana, combatió las herejías y organizó misiones para la propagación del Evangelio.
Se le atribuye el haber designado en el Vaticano un lugar, junto a la tumba de San Pedro, para sepulcro de los Papas; en él fue enterrado el mismo San Anacleto.
No se sabe exactamente si sufrió el martirio bajo el imperio de Domiciano o de Trajano, y no se tienen como auténticas algunas cartas decretales que llevan el nombre de Anacleto; una de ellas dirigida "A los obispos y a los fieles", otra "A los obispos de Italia" y una tercera "A los obispos y a los sacerdotes".
Los Papas, desde San Pedro hasta Pío XII
Giuseppe Arienti
Con Licencia Eclesiástica 1945